No siempre somos conscientes de los riesgos que conlleva conducir bajo la lluvia. Aunque sepamos que las primeras gotas y el conocido aquaplaning es lo más peligroso, un fenómeno que produce cientos de siniestros. Sin embargo, hay ciertas precauciones que pueden ayudarnos a evitar riesgos innecesarios.

Os dejamos una serie de consejos para reducir el riesgo:

1. Circula siempre con las luces de carretera, no sólo es importante ver por dónde va tu vehículo sino también que los demás te vean. Si es necesario circula también con las luces antiniebla. Con los cambios a nuestro alrededor nuestra capacidad de reacción se ve disminuida y debemos tener cuidado para reaccionar a tiempo. La lluvia empeora la visibilidad, no se ven con claridad las señales y cuesta ver al resto de vehículos a través de los espejos. Unos cristales bien limpios pueden ayudarte a tener una mayor visibilidad.
2. Mantén la distancia de seguridad necesaria para poder tener control sobre tu vehículo. Debes tener en cuenta que la distancia sobre asfalto mojado es mayor y necesitas más tiempo para frenar.
3. En el caso de tener que frenar, si tu coche no tiene ABS frena suavemente y si sí que tiene ABS pisa el freno a fondo.
4. El aquaplaning. Presta atención a las zonas donde se acumula el agua, son un gran riesgo sobre todo al caer las primeras gotas de lluvia por el riesgo de aquaplaning. Si viajamos a una velocidad indebida es complicado controlar el coche en estos momentos. Es importante contar con unos neumáticos en buen estado, realizar una adecuada revisión de tu vehículo, más cuando se va a tener un largo viaje.

Si sufres un accidente, incluso bajo la lluvia, no dudes en contactar con GruasLT. Asistencia en carretera en Zaragoza.