El correcto mantenimiento de los neumáticos de tu coche es importante para tu seguridad, son el contacto con el asfalto y deben de tener un mantenimiento adecuado.
Conducir de forma adecuada es el primero paso para poder contar con unos neumáticos en buen estado. Evitar acelerones y frenazos bruscos y no quemar rueda. Además de tener en cuenta el tipo de asfalto por el que se circula, un asfalto en mal estado dañará tus neumáticos.
Adapta la velocidad a las circunstancias de circulación para no dañar los neumáticos, sobre todo si hay zonas bacheadas o al circular sobre badenes. Al aparcar presta atención y cuidado a los bordillos, puedes desllantar las ruedas.
El montaje y equilibrado de ruedas debe ser realizado por un profesional para evitar que haya vibraciones o desviaciones en la dirección. Además, revisar el desgaste de las ruedas y reemplazarlas por unas nuevas si es necesario. El límite de 1,6 mm y de 4,0 mm en los de invierno. Que no exista riesgo de que la goma pierda efectividad y por supuesto nunca compres neumáticos usados.
Si se cuidan bien los neumáticos pueden estar en perfectas condiciones hasta la fecha de reemplazo. Comprobar la presión y la rotación de las ruedas regularmente, más cuando se va a realizar un trayecto de largo recorrido.
Siempre que haya indicadores de desgaste de la banda, dibujos desiguales en la rueda, presencia de bultos, desgarros o pinchazos… será altamente necesario comprar unos nuevos neumáticos. Cuando cambies los neumáticos, si es posible cambia los cuatro a la vez para poder obtener un buen nivel de control sobre el vehículo. Además, en la medida de lo posible, procura que los nuevos neumáticos sean iguales a los antiguos.