Uno de los mayores problemas de los conductores es que nuestro vehículo sufra una avería y quede varado en mitad de la carretera. Cuando se da esta circunstancia disponer de una cobertura de asistencia en carretera es fundamental, sobretodo en el caso de que uses constantemente el coche ya sea por trabajo u ocio.

Lo cierto es que la mayoría de las veces que nuestro vehículo sufre una avería no necesita los servicios de asistencia en carretera, ya que problemas habituales como fallos en el turbocompresor o en la dirección del volante no requieren que una grúa venga a por nuestro coche. Sin embargo, existen otros casos que aunque en menor medida también podemos sufrirlo y requerir la asistencia en carretera. Estos fallos que provocan que necesitemos una grúa son:

• Que el motor de nuestro coche se rompa. En el 50% de los casos que necesitamos una grúa este suele ser el factor.
• La batería es otro de los fallos que requieren los servicios de la grúa, en este caso ronda el 24% de los casos.
• El sistema eléctrico también suele fallar en ciertas ocasiones. El 11% de los servicios de asistencia en carretera se deben a fallos en el sistema eléctrico.

Todos estos datos son muy curiosos puesto que a pesar de lo que la gente pueda creer, en más del 90% de los casos en los que ha hecho falta los servicios de una grúa para la retirada de un vehículo se han debido a fallos en el coche (batería, motor, sistema eléctrico, etc.) y no ha causa de un accidente en carretera.

La asistencia en carretera para vehículos que han ocasionado o han sido victimas de un accidente de tráfico suele rondar entorno al 5 o 10% al año.